Miles Young: Comparto, luego existo

Durante la hora que duró el discurso, Miles demostró que la compartición, y particularmente la publicidad, tiene un factor beneficioso para los usuarios, hecho que demostró a través de argumentos químicos y psicológicos. Además, exhibió distintos trabajos que tuvieron un gran impacto en el público y esto se vio evidenciado con los aplausos y la ovación de la gente mientras eran proyectados.

El Worldwide Chairman y CEO de Ogilvy & Mather, llegó especialmente desde Inglaterra a El Ojo de Iberoamérica para plantear los beneficios de la compartición en internet. Para ello, mostró distintas historias que variaban entre el humor y lo absurdo ya que para Miles al contar una historia “se pueden transmitir cosas que de otra manera no se podrían contar”. Las que más éxito tuvieron en el público fueron Share a Coke y Dove Real Beauty Sketches. En este último, la historia era la siguiente: un dibujante realizaba retratos sobre distintas mujeres para mostrarles la diferencia entre cómo ellas creen que se ven y cómo realmente se ven, apuntando a que valoren mucho más su belleza.

Analizando el título, El Arte de la Excitación, Miles hizo énfasis en su significado psicológico y no tanto en su definición académica, ya que es el primero el que lleva a la compatrición. Esta última, está determinada en una primera instancia por la “emoción incontrolable” que genera transmitir información con los amigos y los demás usuarios. En definitiva, la conexión tiene su combustible en el contenido emocional, es decir que las sensaciones son la materia prima para los vínculos virtuales.

Para justificar el tema de su conferencia brindó varios ejemplos, uno de ellos fue el caso de P.T. Barnum que realizó un afiche en el siglo XIX donde promocionaba a un mono atado a un pescado, y lo presentaba como si fuese una sirena. Acto seguido, Barnum comenzó a gritar ‘miren, miren a la sirena’, hecho que para Miles Young fue la antesala de la compartición y la transmisión masiva de datos en Internet.

La justificación química que dio Miles Young respecto de la transmisión de información fue: “Lo que sucede es que la dopamina es un neurotransmisor que estimula y genera la creatividad, y este se activa frente a la sorpresa, las emociones y los sentimientos. Entonces, la creatividad y la publicidad es buena para ustedes”.

En síntesis, Miles Young mostró historias graciosas, absurdas y controvertidas, pero el factor común que tuvieron fue la sorpresa, sensación que funciona como el impulsor emocional para la compartición. De esta forma, demostró la importancia de la dimensión social en la publicidad, y también dejó en claro que los clientes deben considerar más a las emociones antes que a la racionalidad, ya que esto es lo que realmente vende.