Con su conferencia “Publicidad accesible: herramientas para la inclusión”, Andrés Terrille, consultor en accesibilidad digital y comunicación inclusiva en la empresa social de inclusión Libertate, mostró en la edición XXV de El Ojo de Iberoamérica cómo es la realidad de las personas con discapacidad que consumen contenidos de comunicación y publicidad.

La charla se planteó a partir de un par de preguntas disparadoras: “¿Alguna vez pensaron cómo consumen publicidad las personas ciegas o sordas? ¿Todas las personas pueden entender las publicidades?”, disparó el especialista, que es una persona ciega y antes de comenzar su exposición había pedido un aplauso a la audiencia “para poder calcular cuántos somos en la sala”.

En su rol de moderadora del ciclo sobre equidad, diversidad e inclusión en publicidad que auspició Disney LATAM durante los tres días del festival, Yan de Simone destacó la importancia de que el trabajo creativo se pregunte cómo lograr que un contenido sea accesible para todo el público y no deje a nadie afuera; y que en una actualidad de múltiples espacios, medios y plataformas donde reproducir mensajes es “importante la permanente actualización de los recursos con los que contamos”.

En base a esa consigna, Andy también ofreció algunas herramientas disponibles para que los contenidos sean más inclusivos, al alcance de todos, aunque la mayoría de la gente no las tiene demasiado presentes ni son muy difundidas.

Licenciado en Comunicación y diplomado en diseño de experiencias digitales, empezó por definir la accesibilidad: “Parece algo muy conceptual, pero no es tán difícil. Es el proceso por el cual facilitamos las condiciones para que todas las personas podamos participar de manera igualitaria en la sociedad”, sintetizó lo cual dio pie a enumerar cuáles son las barreras que cotidianamente obstaculizan ese derecho.

Habló de barreras físicas. “Son las más obvias: cordones de la vereda, escalones, rampas”, enumeró. También de las comunicacionales. “Como venía a dar una charla en El Ojo, ayer llamé a una amiga para que me contara si había carteles publicitarios en Buenos Aires, y de qué eran, porque no puedo verlos, y el audio que me mandó fue larguísimo”, ejemplificó. Y se preguntó: “¿Todas las publicidades de la TV están subtituladas?, ¿alguna tiene audio descriptivo disponible?”.

“Algunos programas de televisión tienen audio descriptivo. Pero tengo derecho también a saber qué pasa en las publicidades, porque culturalmente estamos atravesados por los comerciales. Pero muchos me los estoy perdiendo, o los estoy recibiendo en forma recortada”, aseguró.

Otro tipo de obstáculos que definió son los digitales. “Son un poco más complicadas de entender. Tienen que ver con cómo interactúan las publicidades con los productos de apoyo que tenemos las personas con discapacidad para interactuar”. Un ejemplo que citó es el texto descriptivo de Instagram, disponible en esa y la mayoría de las redes sociales, pero muy poco utilizado.

Además, pasó el video de una reunión suya en un bar para mostrar cómo usan las personas ciegas el celular. “Los ciegos no miramos la pantalla, nos acercamos el parlante del teléfono a la oreja”, describió mientras las imágenes lo mostraban escuchando su teléfono y mostrando una imagen a sus acompañantes.

Andy también se refirió a las barreras procedimentales; aquellas que debe enfrentar, por ejemplo, cuando lo convocan a participar de un casting para una publicidad y debe completar un formulario escrito, firmarlo y enviarlo por mail; y además adjuntar varias selfies con ciertas características de encuadre y en determinado espacio físico.

“Tengo que llamar a un amigo, que deje por unas horas su trabajo y venga a ayudarme, así sigo con el casting. Sería mejor que manden un formulario que pueda resolver solo”, propuso. Y sintetizó: “Hay un montón de procedimientos donde no estamos contempladas las personas con discapacidad”.

Antes de explicar cómo funcionan algunas herramientas digitales sencillas para ayudar a las personas con discapacidad a superar al menos en parte estas barreras, Andrés hizo una aclaración a la audiencia: “Todo esto no es un reto, no se trata de eso. Yo también cometo errores en lo que hace a accesibilidad de personas que no son como yo. Se trata de hacernos preguntas y de pensar un poco sobre este tema, para ayudar”.

“Es fundamental pensar en estas barreras cuando vamos a encarar la producción de un comercial. Tener presente que hay formas alternativas de consumir publicidad”, aseguró para luego mostrar otro video que describió las maneras en que personas ciegas consumen contenidos, y cómo les facilitan el acceso herramientas como el texto alternativo, el audio descriptivo, los lectores de pantalla del celular (la descripción de imagen con audio), las herramientas de contraste que ofrecen las redes al postear.

“La experiencia de las personas ciegas en las redes sociales puede ser muy diferente en base a cómo todos ustedes hagan sus posteos. Y no sale casi nada implementar todo eso. El único costo es la información. Tener información de que estas herramientas existen”, invitó el especialista, quien también se desempeña como productor de radio y anteriormente fue integrante estable de Teatro Ciego.

Andy reservó para el final de la charla el tratamiento de un obstáculo que -según considera- es el de mayor impacto en la accesibilidad de las personas con discapacidad: la barrera cultural.

“Tiene que ver con los estereotipos, los sesgos, el lugar que se nos asigna, las representaciones que se hacen de nosotros. Todo eso que nos ubica en un punto determinado en la sociedad”, resumió. Y convocó a revisarlo y tenerlo presente en el trabajo creativo. “¿Cómo significamos a las personas con discapacidad en las publicidades?, ¿en qué tipo de piezas aparecen personas con discapacidad? ¿sólo en las que hablan de discapacidad?”, interpeló. Y bromeó: “Yo no conozco ningún ciego que use lentes de sol, bastón y lazarillo, ¿todo eso me tengo que poner para participar de un comercial?”.

El representante de Libertate dio números para dimensionar a la audiencia de las personas con discapacidad, “Probablemente los va a sorprender, pero se calcula que en el mundo somos el 15% de la población. En países como Brasil, el 23%. En Argentina cerca del 13%, según el censo de 2010. ¿Ustedes ven un 13% de personas con discapacidad en las publicidades de este festival? No estamos representados porque hay barreras que nos impiden participar de la misma manera en la sociedad”, aseguró.

“Hace 15 años, el lugar que ocupaba el feminismo no es el mismo que ahora. Algo pasó, culturalmente, para que ahora el feminismo tenga otro lugar en los mensajes, en los contenidos y en la sociedad. Mi sueño es que la discapacidad y las barreras culturales que enfrenta siga un poco ese rumbo”, aseguró antes de despedirse con una propuesta para los asistentes a la conferencia: sacar una foto de la imagen que mostró en pantalla y publicarla en Instagram con audio descriptivo y un hashtag. Los aplausos volvieron a sonar. Y duraron un buen rato.